Si eres un buen soldado sabrás que hay guerras que no se pueden ganar. Reconocerás las derrotas aunque vengan bajo la palabra del armisticio. Verás que existen enemigos complicados de neutralizar. El tiempo, el espacio. Te quedará claro que las letras pueden asfixiar, a la vez que no logran encender chispa alguna. Es posible que te canses de perder, de no lograr nunca ningún objetivo, pero tranquilo, la vida no es una Blitzkrieg. Existe un rayo de esperanza. Hay que seguir de pie. En las trincheras del dolor no gana nadie.
Mundos que se abrían de repente desaparecerán, y sueños que se acariciaban seguirán siendo quimeras e ilusiones. Deja de buscar el día perfecto, no llegará. Deja de lamentarte, no hay lágrima que cambie el resultado. Siempre habrán otros que te superen con la connivencia de las circunstancias. El esfuerzo no decide nada, sólo la oportunidad. Sí, la pasión es una mano que llega a ahogar, y las emociones que no se sienten cuesta entenderlas. Lo que para alguien es una brisa para otra persona es un huracán que asesina.
He llegado hasta aquí, me han llevado a sitios que no creí visitar, y estoy paseando por otros que esperaba no volver a ver. Así es la felicidad. Un carrusel que sube y baja, una mano que se acerca y luego se aleja. Vi pasar las estrellas fugaces, los años voraces, y cuanto más tenía más quería. Una bestia sin fondo, sin fin, una línea recta que nunca acaba. Todo eso cambiará. Se desbordó el río y se acabó el mar. Lucharé por conservar la belleza que todavía pervive, las pepitas de oro que hay entre la sal y la lluvia.
He visto el precipicio, y no tiene fondo. He visto la pena y no tiene límite. He visto lo imposible tornarse posible unos segundos. Y no quiero nada de eso. Que me corten las alas, que la tinta deje de correr libre y que las emociones se encarcelen en cajas de las que nunca debieron salir. Lo que sea, menos el vacío que deja tu ausencia eterna. Perder la mitad de lo que soy es mejor recompensa que darle mi cuerpo a los leones del Olvido.
Este maremágnum no se acaba aquí, pero se retiene, sobre presas que podrían soportar el agua del universo, no así lo que soy. Dejaré la flecha sin arco, me pondré la sombra, te abrazaré y le daré la espalda a la nada. Pondré cortafuegos a la llama que por este bosque infinito se extiende.
Necesito que seas tú, sin cadenas ni presiones, sin pesos ni obligaciones. No quiero nada que no desees entregar con gusto, ni risas forzadas, ni palabras obligadas. No quiero triunfar. No quiero mi gloria por encima de tus deseos. No quiero un beso que sepa a deuda. No quiero lastrar nada en tu vida. Nadie debería querer realizar acciones así.
Lo que sí quiero, y necesito, es que sigas aquí, a mi lado, aunque nunca lo hayas estado realmente. Esa es mi lucha. No importa qué, ni quién. Siempre has sido el viento, y es lo que debes seguir siendo. Y si alguna vez debo dejar el camino para que eso siga siendo posible, así lo haré. Aunque ese día se estrellen los astros y se apague el sol.
Todo eso te amo.
https://youtu.be/9Z-WQIrDAMQ
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