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lunes, 1 de octubre de 2018

El posible espejo

Tú te miras
y él te mira,
o quizá tú lo miras,
y él se ve en ti.

Un mundo al revés,
Uróboros sin morderse,
los entrantes y salientes,
la pantalla del aire.

Hay un resplandor
que no es el tuyo,
un asesino que corta
todas las extremidades.

He visto un surco
precioso y él no,
una enredadera oscura
escalando en la nieve.

Podría tocar la seda,
el pelaje de un conejo,
una estrella fugaz,
o el dulzor de un libro.

Y tocar lo que enseña
él sería mucho mejor,
el frío pasando por
cada parte del erizo.

Tú crees que así
enseñas quien eres
sin enseñarlo,
matando sin la mirada.

Lo que él no sabe es
que si lo mirases,
y él te mirase también
tal y como sois,
todo se uniría
en mil pedazos.

Y tal vez nunca lo sabrás.

sábado, 29 de septiembre de 2018

Regalos

Quise regalarte
un castillo escocés
porque eres inmensa,
pero no soy ningún noble.

Quise regalarte 
un palacio perdido
porque eres un lujo,
pero no soy ningún rey.

Quise regalarte
la luna y sus estrellas
porque brillas igual,
pero no soy un Dios.

Quise regalarte
los ríos y los bosques
y perderme en ti
y tú en ellos,
pero no soy la Madre.

Quise regalarte 
una vida eterna, y
que enamorases al mundo,
pero no soy el demonio.

Quise regalarte
tantas cosas, tantos besos,
tantas olas, tantas dichas,
pero no soy omnipotente.

Por eso te regalo esto,
lo que significas para mí,
lo que creas sin saberlo,
porque, al menos, soy yo.

Y tú estás aquí. 

martes, 25 de septiembre de 2018

Transiciones

Hoy puedo ver las
estrellas desde casa,
mientras el viento
del norte trae tu voz.

Te deslizas entre
mis ojos, sigilosa,
y llevas contigo el brillo
que no surca el cielo.

Me desato y me adentro,
hay palabras que
una vez dichas no tienen
retroceso alguno.

Y yo miro a la muerte
de frente, acobardado,
y me pregunto si
esta guerra la firmamos.

Ahora todo es una chispa,
una mota de polvo,
pero sé que arderán almenas,
que se moverán las fichas.

Pero antes de que empiecen
las balas a volar,
debes saber que eres fuego,
magia que salva el mundo.

No creo en el destino,
pero creo en ti, en tu risa, 
en tu voz cambiante
y tus danzas mortales.

Ya lo ves, me siento
en la oscuridad, bajo el frío,
y es en ti en quien pienso
cuando brotan las emociones.

Eres la sombra que crece,
el árbol que madura,
la flor que asombra
y la alegría que embarga.

Eres la tinta en mis venas.

viernes, 17 de agosto de 2018

Revelaciones

Te he visto brillar
cuando creías que
no había ya luz, que
se apagaba el mundo.

Has hablado conmigo
día tras día, cada hora,
sin siquiera saber mi nombre,
tras la sombra del pájaro.

Y tal vez seré el olvido,
y tú quedarás difuminada
con el vuelo de Cronos,
con la marca del silencio.

Y tal vez descubras que
tu belleza hace callar
al tiempo que invade,
ya te entregarán mil pendones.

Quisiera poder abrir
la veda que lleva a tus olas,
escuchar el timbre que
en tu interior resuena.

Quisiera poder mirar
en tu dirección y no
ver un espejo que devuelve
la misma soledad infinita.

Podrías ser, para mí, dos cosas:
un desierto enorme con
un oasis lánguido,
o los valles olvidados
del Parnaso.

jueves, 16 de agosto de 2018

Amanece

Amanece, sobre el 
mismo cielo, sobre el
tupido velo del árbol
y tu cara dormida.

Sé que no estás,
pero te busco entre
el mar de gente,
entre rostros interrogantes.

Nadie diría que hay belleza
en encontrar cicatrices,
en observar las sombras
de dioses olvidados.

Tal vez quería encontrarte
y nunca supe que
podría ver brillar tantas
bolas de gas ante mí.

Y me acerco, y extiendo
la mano hacia arriba,
queriendo, quizá, acariciar
la luz que transmites.

Y sé que no estás, pero 
me gusta buscarte,
saborear lo que encuentro,
empaparme en tu magia.

Amanece, sobre bailes
que nunca se hicieron,
sobre tus olas que me
arrastran y nunca me
han de soltar.

martes, 14 de agosto de 2018

Otro escenario

Te vi entre olas de palabras,
retahílas muertas,
sensaciones preparadas,
fuiste el rayo en la calma.

Cogiste un saco de la nada
y te llevaste el aire,
yo ya no sabía si tú bailabas
o eras la canción que sonaba.

Te observé despeinarte,
lanzar al aire mil sensaciones,
y dejarte llevar por el mundo
a ninguna parte conocida.

Sumas y sigues, igual
que una huella eterna,
igual que una flecha
que golpea sin descanso.

Te veo entre las notas,
entre la arena de la playa,
entre los sueños que nunca tuve
y en cada gota que de la fuente emana.

Y tú, ¿llegarás a verme?,
¿bailarás conmigo aquello 
que nunca supimos
siquiera probar?

¿Quién sueña?

¿Somos nosotros quienes
soñamos, o alguien más
nos sueña?

Creemos ver pasar
las luces en un destello,
años que se apagan
y muertes que embellecen.

Un parpadeo, un segundo,
no disfrutamos lo
pequeños que somos,
el trazo simple del dibujo.

Yo me guardo tu sonrisa,
el cruce de miradas,
las pocas palabras lanzadas
y cada gesto agradable,

Quizá aprecio en exceso
y la rueda gira sin notarse,
pero entendí que lo grandilocuente
se forma con granos de tiempo.

Sé que alguien nos sueña
y nosotros andamos
sobre mundos inciertos,
sobre escenarios desiertos.

Si quieres ábreme, bebe
de mí como de la fuente,
si quieres ábrete, verás que
se hacen imperios en horas.

Dime quién soy, y te contaré
quién eres, qué esconde tu velo,
dime qué hay, y te revelaré
qué color esconden tus ojos.

Sé que nos sueñan, así como
a estas palabras, que no
me pertenecen ni lo harán ,
pues son a ti debidas.

https://youtu.be/0yW7w8F2TVA